Patrimonio natural y patrimonio industrial. A propósito del traslado de Peñas Negras a Gallarta.
El 16 de octubre de 2015, hace un mes, el diputado general de Bizkaia, Unai Rementeria; el viceconsejero de Medio Ambiente, Iosu Madariaga; la alcaldesa de Abanto-Zierbena, Maite Etxebarria, y el presidente de la Fundación Museo Minero, Carmelo Uriarte, enterraron un fragmento de goethita, junto al acta que certifica el inicio de la obra, los periódicos del día y monedas en el acto de colocación de la primera piedra del futuro centro de interpretación del parque cultural y ambiental de la minería.
En Gallarta, ubicado en el antiguo matadero se encuentra la sede del Museo de la Minería del País Vasco. Entre los años 2008 y 2009, por iniciativa de la Fundación del Museo se ejecutaron las obras de la primera fase de la nueva sede -la construcción de la estructura de hormigón armado- según proyecto de 2005 de IMB Arquitectos. Esta primera fase, por un importe económico de 2.800.000 euros no tuvo continuidad debido a la crisis económica. La Fundación del Museo de la Minería la integran junto a los voluntarios que han creado y gestionado el museo, el Ayuntamiento de Abanto-Zierbena y la Diputación Foral de Bizkaia.
En Peñas Negras (Ortuella) el Departamento de Medio Ambiente y Política Territorial del Gobierno Vasco mantiene el Centro de Interpretación Ambiental de Peñas Negras. El departamento mantiene además abiertos los CEIDA conjuntamente con el Departamento de Educación y el Museo Medioambiental Ingurugiro-etxea de Azpeitia en Gipuzkoa todos ellos dedicados a la educación ambiental de los escolares.
Por decreto 26/2015, de 10 de marzo, se declaró el Biotopo Protegido de Meatzaldea – Zona Minera de Bizkaia (BOPV 17/03/2015) por sus valores culturales y naturales ya que «dicha explotación -la de los filones de hierro- dio lugar a un paisaje de gran singularidad, único en la Comunidad Autónoma del País Vasco, cuyos valores están asociados al legado minero y a su patrimonio cultural, siendo el paraje conocido como «Alta de Galdames» o monte «Grumeran» uno de los mejores representantes en ese sentido.»
El 24 de noviembre de 2014, el Diputado Foral de Medio Ambiente de la Diputación de Bizkaia, Iosu Madariaga; la alcaldesa de Abanto Zierbena, Maite Etxebarria; y el presidente de la Fundación Museo de la Minería del País Vasco, Carmelo Uriarte, firmaron el acuerdo para la ejecución del proyecto constructivo del Centro de Interpretación del Parque Cultural y Ambiental de la Minería del País Vasco, por el que la Diputación aportará 900.000 euros (800.000 euros en 2014 y 100.000 euros en 2015), en tanto que el Ayuntamiento de Abanto Zierbena añadirá una partida de 45.000 euros. Está previsto que el departamento de Medio Ambiente del Gobierno Vasco se sume al proyecto con una inversión de otros 900.000 euros, lo que posibilitará acometer las obras de construcción de la primera fase del Parque, cuyo presupuesto es de 1.845.000 euros. La estimación es que las obras concluyeran antes de finalizar 2015 aunque finalmente se retrasarán hasta 2017. Efectivamente, el día 5 de marzo de 2015 la consejera de Medio Ambiente y Política Territorial del Gobierno Vasco, Ana Oregi; la alcaldesa de Abanto Zierbena, Maite Etxebarria; y el presidente de la Fundación Museo de la Minería del País Vasco, Carmelo Uriarte, firmaron el acuerdo para la ejecución del proyecto constructivo, junto a la Diputación Foral de Bizkaia, del Centro de Interpretación del Parque Cultural y Ambiental de la Minería del País Vasco.
Recientemente, la asociación Burdin Herria formada por vecinos de Trapagaran, Ortuella y Abanto-Zierbena, han hecho público su malestar por el traslado del centro de Peñas Negras dando las razones por las que se oponen al mismo.
La Asociación Vasca de Patrimonio Industrial y Obra Pública, AVPIOP-IOHLEE, entiende que es bienvenido cualquier debate sobre el patrimonio así como la participación pública de la sociedad en las decisiones que las administraciones adoptan. No obstante, en este caso concreto, y atendiendo fundamentalmente a los aspectos de sostenibilidad económica de un proyecto serio y con futuro para la sede del Museo de la Minería que surgió ya hace décadas del trabajo desinteresado de voluntarios de la cuenca minera, asume que la inclusión en la nueva sede de Gallarta del contenido y funciones del centro de Peñas Negras es probablemente la opción más viable. La declaración del Biotopo Protegido de Meatzaldea, la participación en el proyecto cultural de los departamentos de medio ambiente de la Diputación Foral y del Gobierno Vasco y la visión paisajística y armonizadora del patrimonio natural y del patrimonio cultural son razones que nos parecen suficientemente importantes para apoyar en este caso la solución finalmente adoptada. No obstante, dada la magnífica labor cultural y educativa desarrollada durante estos años por el centro de Piedras Negras, tanto los puestos de trabajo como las líneas de actuación debieran ser salvaguardadas en esta nueva etapa prevista, si es que esta llega a concretarse.
Se ha dicho -(Linarejos Cruz e Ignacio Español: Los paisajes de la industrialización– que se pueden considerar paisajes de la industrialización aquellos territorios que, conformados a lo largo del tiempo como consecuencia del desarrollo de actividades industriales o en relación con ellas, conservan elementos y rasgos suficientes para ilustrar las aportaciones de aquel proceso histórico y que la aproximación al paisaje cultural debe ser necesariamente compleja, pues involucra aspectos y consideraciones de muy diversa naturaleza. Si, en este caso concreto, las cosas se hacen bien, la consideración integral del paisaje de la minería vizcaíno por excelencia contemplando todos los posibles aspectos geomorfológicos, naturalísticos, culturales, etc. y su evolución a lo largo de los tiempos puede considerarse una opción acertada. Una opción que no es habitual, cuando contemplamos las amenazas que pesan sobre molinos, ferrerías o presas en aras de opciones presuntamente «medioambientales» o el triste ejemplo de las actuaciones contra el faro histórico de Matxitxako perpetradas desde la Reserva de la Biosfera de Urdaibai.
Finalmente, la opción por la instalación un Centro de Interpretación del Parque Cultural y Ambiental de la Minería del País Vasco en Gallarta, no tendría por qué significar, sino todo lo contrario, un abandono del resto del territorio del parque y su patrimonio.
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