El pasado sábado día 2 de enero, el periódico Deia publicaba dentro de la serie Historias de los vascos, un reportaje firmado por Pedro Etxabe Etxabe titulado El proyecto ZIIZ: la recuperación del patrimonio industrial e histórico de Zumaia que reproducimos por su interés. La agrupación ZIIZ realiza una notable y encomiable labor de preservación y difusión del patrimonio industrial de Zumaia así como de la historia de la industrialización de Zumaia que desde la Asociación Vasca de Patrimonio Industrial y Obra Pública, AVPIOP-IOHLEE queremos resaltar:

Miembros del equipo del proyecto ZIIZ, ante el edificio de la antigua estación del puerto (Foto Pedro Etxabe / Deia)

Miembros del equipo del proyecto ZIIZ, ante el edificio de la antigua estación del puerto (Foto Pedro Etxabe / Deia)

 

El proyecto ZIIZ: La recuperación del patrimonio industrial e histórico de Zumaia

El proyecto Zumaiako Industria-ondarearen Informazio Zentroa fue puesto en marcha en 2009 por seis personas

LA idea de acometer un trabajo de investigación sobre la industrialización de Zumaia surge del proceso que se dio, principalmente en la última parte del pasado siglo, de cierre y demolición de empresas que jugaron un papel clave en la vida de los zumaianos y en la economía del pueblo, sin dejar ningún vestigio de ellas.

En la segunda mitad del siglo XX, en Inglaterra, Estados Unidos y Europa comenzaron a reconocer el valor del patrimonio industrial, como parte de la historia y la cultura de los pueblos. En Zumaia no se atisbaba ninguna sensibilidad al respecto y fueron desapareciendo, algunos elementos emblemáticos del pasado reciente de nuestro pueblo. Por citar un par de ejemplos, la antigua yutera de Arbillaga, “pieza singular de la arquitectura industrial guipuzcoana” que hubiera merecido ser conservada -al menos el voladizo central de la fachada- “con cuya desaparición se mutilaba parte de la memoria del desarrollo industrial del bajo Urola”. Y la grúa de la rampa de Arbustain, todo un icono de la industrialización de Zumaia, que por la desidia de unos, la irresponsabilidad de otros y la falta de sensibilización de la mayoría “se le dejó caer”, a pesar de las advertencias sobre su estado realizadas por algunos vecinos a las autoridades locales.

PRIMEROS PASOS Allá por el mes de marzo de 2009, un grupo de seis personas formado por cuatro jubilados, con diferentes experiencias en el mundo industrial y con conocimiento de la industria de Zumaia, un profesor de Historia del Arte de la facultad de Bellas Artes de la UPV/EHU y una licenciada en Historia y Antropología -todos ellos interesados por el tema-, constituyen un equipo de trabajo y ponen en marcha el proyecto denominado Zumaiako Industria-ondarearen Informazio Zentroa-ZIIZ.

El objeto del proyecto es estudiar, recuperar, conservar y difundir el Patrimonio Industrial del pueblo y en función de los resultados que se logren, crear un espacio donde se exponga de manera permanente el pasado industrial de Zumaia, pasado en el que se ha cimentado en buena parte la actual industria zumaiana.

Los primeros pasos se dirigen a la búsqueda de información y documentación. Aunque en un principio se pretende abarcar al sector industrial en su conjunto, se decide acotar el campo de actuación en aquéllas empresas fundadas a partir de mediados del siglo XIX y que ya no existen, pertenecientes a los cuatro sectores que mayor impacto tuvieron en el desarrollo industrial de Zumaia: fabricación de cemento, construcción naval, construcción de motores, y la máquina-herramienta y otras máquinas.

Fábrica de cemento de Uriarte y Zubimendi en Bedua en 1917. (Foto: Pedro Etxabe)

Fábrica de cemento de Uriarte y Zubimendi en Bedua en 1917. (Foto: Pedro Etxabe)

 

CEMENTO NATURAL O CAL HIDRÁULICA De los cuatro sectores antes apuntados, el cementero fue el que activó la industrialización de Zumaia. El cemento natural, también conocido como cal hidráulica, constituyó, en la segunda mitad del siglo XIX, el producto estrella del Bajo Urola, dando origen a una potente industria cementera que se instaló en los municipios de Zumaia y Zestoa. Llegó a alcanzar un gran renombre, incluso a nivel internacional, por sus excelentes cualidades, en particular para las obras hidráulicas, siendo conocido como Cemento Zumaya e influyó decisivamente en la mejora de las infraestructuras portuarias de Zumaia, por las necesidades de transporte del cemento fabricado por las empresas.

Las circunstancias geológicas fueron determinantes en el nacimiento de esta industria. La proximidad y accesibilidad de las dos primeras materias necesarias para su producción -la marga o caliza arcillosa de las canteras de Ibañarrieta y el carbón del tipo lignito de las minas del monte Ertxina- en las inmediaciones de Aizarna, fueron las claves.

Corta y Cía., Eusebio Gurruchaga /Sansinenea e Hijos, Olave y Cía. /Olaizola y Cía., Echeverria, Echave y Cía., Uriarte y Zubimendi, Esteban Aranguren y Cía., Alberdi y Cía. y Gurruchaga, López y Cía. fueron los fabricantes del cemento natural del Bajo Urola.

Con el paso de los años, el cemento natural fue cediendo ante la competencia del cemento Portland, siendo la fábrica de Bedua, propiedad de Uriarte, Corta y Zubimendi, S.A., tras la absorción de Corta y Cía. por parte de Uriarte y Zubimendi, la última en cerrar sus puertas el año 1972.

Botadura del barco ‘Ramonchu’ en los astilleros de Querejeta en 1918 (Fototeka Kutxa)

Botadura del barco ‘Ramonchu’ en los astilleros de Querejeta en 1918 (Fototeka Kutxa)

 

CONSTRUCCIÓN NAVAL La construcción naval de Zumaia, con antecedentes destacados en el siglo XVI, renació al filo de los siglos XIX y XX, con gran efervescencia al final de la Primera Guerra Mmundial, con la construcción de cascos de barcos de madera, en los astilleros de Pedro Alberdi, Francisco Querejeta e Hijos, Astilleros Eraso, Alberdi y Cía., Arrizabalaga y Olasagasti y Galarraga y Urbieta y José María Egaña, entre otros, y cascos de chapa en La Constructora Metálica y Balenciaga, S.A. y es de señalar el proyecto de instalación de un astillero para la construcción de barcos de hormigón armado, por parte de la Sociedad de Construcciones Navales de Hormigón Armado, de Bilbao, que finalmente no llegó a materializarse.

Esta actividad generó a su alrededor una serie de empresas dedicadas al equipamiento y montaje de barcos, desde fabricantes de motores hasta caldererías, carpinterías, talleres eléctricos y de montaje general.

Hoy en día, es Astilleros Balenciaga con sus más de 90 años de existencia -empresa decana de la industria zumaiana- la que mantiene la actividad, ofreciendo no solo el casco, sino barcos completos con todos los componentes e instalaciones, utilizando las tecnologías más avanzadas tanto en los procesos de producción como en el equipamiento de los buques.

Motor Yeregui de dos cilindros fabricado en Zumaia (Foto ZIIZ)

Motor Yeregui de dos cilindros fabricado en Zumaia (Foto ZIIZ)

 

LA FABRICACIÓN DE MOTORES El paso de la vela a la propulsión mecánica de los barcos supuso un considerable progreso para la navegación, dando origen a una nueva actividad industrial en Zumaia. La fabricación de motores, iniciada a principios del siglo XX, sirvió de base para generar una importante industria mecánica, sobre la que se ha cimentado, en buena parte, el posterior desarrollo industrial y económico de la villa.

Por un lado, las máquinas de vapor, con sus calderas, fueron construidas en los talleres de Eraso y Cía., Balenciaga y Cía., Carmelo Unanue y Balenciaga, S.A. Y casi al mismo tiempo, con la llegada a Zumaia de la familia Yeregui, procedente del barrio Aginaga de Usurbil y perteneciente a una saga de relojeros, comienza la fabricación de motores de explosión, abriendo una nueva brecha industrial que es desarrollada por varias empresas a lo largo del tiempo. Bien como actividad principal como Yeregui y Cía., Yeregui Hermanos, Carmelo Unanue, Talleres Beal, Juaristi y Guascor o transitoriamente como Urpe, Urin, Holke, Satesa, etc. Actualmente, se mantiene la actividad de Guascor, con la marca Dresser-Rand Guascor, propiedad de la compañía alemana Siemens.

LA MÁQUÍNA-HERRAMIENTA Y OTRAS MÁQUINAS El caldo de cultivo creado por la formación de una “cultura” y un saber hacer mecánicos -sobre todo con la fabricación de motores- propició la aparición de una nueva actividad. La máquina-herramienta llega a Zumaia de la mano de Otto Holke, de nacionalidad alemana, cuando el año 1935 inicia la fabricación de máquinas fresadoras. La empresa de Holke fue considerada por muchos como una buena escuela de aprendizaje, donde se formaron numerosos profesionales mecánicos tanto de Zumaia como de pueblos cercanos que crearon nuevas empresas o llegaron a ocupar puestos de mando en otras.

Tras la guerra del 36, se crearon otras empresas, algunas productoras de máquinas-herramienta, como Julian Eguiguren, Industrias Satesa, Urpe y Aizape, y otras de maquinaria para trabajar la madera -en el caso de Egurko- o de maquinaria para el mercado siderúrgico y fundición -en el caso de Lagun-Artea-, siendo ésta última la que se mantiene en activo.

DIFUSIÓN DE LOS RESULTADOS Por problemas surgidos con el edificio que en principio podría albergar una exposición permanente, antes mencionada, se aparcó el objetivo principal del proyecto y a sugerencia de Pilar Azurmendi, a la sazón Directora del Patrimonio Histórico de la Diputación de Gipuzkoa, a quien queremos mostrar nuestro agradecimiento, se decide realizar un sitio web donde se plasme la memoria industrial de Zumaia, a través de las historias de 40 empresas de los citados sectores. El mes de mayo de 2014 se hizo la presentación del sitio web www.ziiz.eus donde se puede ver de una manera detallada más de 150 años de la industria zumaiana.

La siguiente acción fue la de colocar unos paneles informativos en los núcleos más significativos en los que se asentaron las empresas industriales. Ante la buena acogida de la idea por parte del Ayuntamiento y con su decidido apoyo se procedió a su instalación en marzo de 2015. El pasado mes de noviembre se organizó una exposición sobre la industrialización de Zumaia que tuvo una gran acogida por parte del público, superando los 2.500 visitantes en las dos semanas que duró la misma. Además durante el desarrollo del proyecto se organizaron charlas sectoriales dirigidas al público en general y una más global para estudiantes de una escuela de la localidad.

DEFENSA Y PROMOCIÓN DEL PATRIMONIO INDUSTRIAL El patrimonio industrial es hoy reconocido como parte de la historia y la cultura de los territorios y se le otorga la consideración de elemento clave de la identidad de aquellos lugares que han conocido procesos de industrialización, observándose un creciente interés por el tema.

Los resultados obtenidos del trabajo realizado por ZIIZ son un aliciente para su difusión y conocimiento público y para preservar y proteger los escasos restos que aún quedan del rico pasado industrial y para que el patrimonio industrial sea incluido en la oferta cultural de Zumaia.

Dos de los elementos que merecen ser conservados son el conjunto de los restos de la fábrica de cemento La Zumayana, de Gurruchaga, López y Cía., que constituye un elemento representativo del sector pionero de la industrialización, ubicado en el barrio de Narrondo. Y el otro es el edificio de la estación del puerto del ferrocarril del Urola, que además de su valor arquitectónico tiene especial significado porque en su entorno estuvo una de los áreas industriales más importantes de Zumaia, del siglo XX.

EL AUTOR

 

ARCHIVO:

05/02/2012 Zumaia. La industria naval y la preservación de la historia por el grupo ZIIZ.