El pasado 3 de junio participamos en la grabación del programa cultural La mitad invisible de TVE. Hablamos de nuestro pasado industrial y de la importancia de preservarlo. Y lo hicimos en un marco incomparable: el Horno Alto de Sestao.
El programa cultural, que lleva Cristina Peñalver en la 2 y que se emitirá en septiembre, quiere dedicar atención al Puente Vizcaya, el primer puente transbordador construido en el mundo. Pero, tal y como el título refleja, para llegar más allá en esa mirada al monumento declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO, sus responsables contactaron con la Asociación Vasca de Patrimonio Industrial y Obra Pública, AVPIOP para intentar acercarse al material con el que está construido, el acero, y a la tradición siderúrgica del País Vasco. De ahí el lugar elegido para entrevistar a nuestro presidente Javier Puertas, ante los restos patrimoniales de la siderurgia vizcaína de la que salieron muchos de los perfiles laminados con los que se levantó la magnífica estructura reticulada, tanto la original de 1890-93 como la viga repuesta en 1939.
También los informativos de EiTB se han interesado por la opinión de AVPIOP con respecto a la situación y el futuro de las naves fundacionales de la Babcock & Wilcox en Sestao en un contexto más amplio sobre fábricas históricas abandonadas. Iñaki Olano, del equipo de Reportajes de ETB-Noticias, se puso en contacto con nosotros y ayer día 16 se realizaron las grabaciones, en las que participaron nuestro presidente Javier Puertas y el vocal Joaquín Cárcamo, ante las naves de Babcock en Sestao-Trapagaran y el horno alto nº 2 en Sestao.
Tanto Javier Puertas como Joaquín Cárcamo insistieron en la necesidad de preservar las naves de Babcock recuperando la arquitectura deteriorada con los expolios habidos durante los últimos años, habilitando para nuevos usos industriales las amplias y diáfanas superficies de las 10 naves fundacionales. Asimismo hicieron un breve balance de lo acontecido durante las últimas décadas y aportaron múltiples ejemplos tanto de pérdidas patrimoniales irreparables como de actuaciones encomiables de preservación y reutilización de instalaciones industriales obsoletas, entre otras, los edificios de Azucarera Alavesa en Vitoria-Gasteiz, de la Unión Cerrajera en Bergara (Gipuzkoa) y de Muñoz Mendizábal-El Tigre en Deusto, Bilbao.
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