Comisariada por el profesor e historiador del arte Javier González de Durana, se ha celebrado en Sopeñano de Mena (Burgos) una exposición sobre la empresa VALCA (VAlle del CAdagua), asentada a orillas del Kadagua (Cadagua) desde los años cuarenta del pasado siglo. De ello se han hecho eco diversos medios de comunicación y así, el diario El Correo publicaba el pasado 18 de abril el siguiente artículo firmado por Gerardo Elorriaga:
Valca revela su historia
Una exposición en el Valle de Mena repasa la trayectoria de la multinacional de material fotográfico creada con capital vasco
BILBAO. Hubo una multinacional, creada con capital vasco y radicada en el Valle de Mena que exportó material fotográfico a los cinco continentes. Valca surgió en plena Guerra Civil española y su primera oficina estuvo en Bilbao, pero, a principios de los años 40, construyó una enorme factoría en el norte de Burgos en la que llegaron a trabajar 350 operarios. «Contaba con una fachada de 50 metros y era un enorme complejo con comedor, economato, capilla, laboratorios y despachos, entre otros servicios», señala Javier González de Durana, promotor de una exposición que repasa su historia y que puede contemplarse en la localidad de Sopeñano, muy cerca de donde estuvo situada. «No hubo familia de la zona y de Las Encartaciones que no tuviera parientes empleados allí».
La firma refleja fielmente la evolución de buena parte de la industria española. «Sus promotores fueron conscientes, en plena contienda, de la futura demanda de este tipo de material», explica González de Durana, en alusión a su éxito durante el largo periodo de autarquía. Pese a todo, vivió un final estrepitoso, ligado a la entrada del país en la Comunidad Económica Europea. «No se adaptaron a la normativa del nuevo mercado, a la caída de aranceles y la nueva concurrencia», indica. En tan sólo seis años, el crecimiento constante se tornó en crisis y ruina. «Su final fue sorprendente porque se trataba de una empresa puntera».
Ahora se cumple un cuarto de siglo de su cierre y, con tal motivo, este investigador ha inaugurado una muestra con documentos y objetos fechados desde el periodo de la posguerra hasta la actualidad. La mitad del inicial consejo de administración de Valca (Valle de Cadagua) se corresponde con el de la corporación Villosa de Llodio– «La primera intención fue emplazarla en Bizkaia o provincias limítrofes y la razón de que se implantara en Mena responde a la necesidad de contar con un flujo de agua constante, limpia y térmicamente estable», apunta el comisario de la muestra. «Me gustaría que el Valle y la zona circundante tomaran conciencia de la importancia histórica y económica de la entidad, de lo que supuso, y que se proteja su patrimonio».
También la prensa de Burgos se ha hecho eco de la exposición. El Diario de Burgos publicaba el siguiente artículo:
Y El Correo de Burgos del 17 de abril anunciaba la exposición y repasaba algunos hitos de la empresa multinacional:
EXPOSICIÓN
Repaso a 40 años de Valca y su vínculo con Valle de Mena
La antigua escuela de Sopeñano acoge una exposición sobre la fábrica de productos fotográficos y su relación con el municipio
La antigua escuela de Sopeñano acoge desde el pasado miércoles, 13 de abril, una exposición sobre la fábrica de productos y material fotográfico Valca de Sopeñano que cerró sus puertas en 1993. Javier González de Durana, profesor de la Universidad del País Vasco y experto en arte, está detrás de esta exposición que, sin duda, traerá recuerdos agridulces a muchos vecinos y trabajadores meneses de la desaparecida empresa que durante más de 40 años fue la principal fuente de riqueza del Valle de Mena.
Apenas hacía un año que había finalizado la guerra civil, cuando en 1940, cuatro familias vascas, las de Oriol, Basterra, Delclaux y Torrontegui, fundan la Sociedad Española de Productos Fotográficos Valca. Las instalaciones fabriles se inician por la empresa Esparza y Piña, de Bilbao, en el páramo de Sopeñano, ocupando una superficie para la actividad fabril de 41.543 metros cuadrados.
El primer director general de la empresa, fue Eduardo Bustillo López, fallecido en 1987, quien figuró con el número uno en el Libro de Matrícula de Valca, y llegó a ser consejero delegado y vicepresidente de la sociedad. El primer producto que se elabora en la factoría de Sopeñano es el de material fotográfico sensible negativo, con sus fabricaciones de placas pancromáticas con soporte de vidrio, único existente entonces en el país, con destino a profesionales y las artes gráficas. Inmediatamente después emprendió la fabricación de papel fotográfico y más tarde la elaboración de películas en sus distintos tipos de película cinematográfica positiva, película de aficionado en rollos y en paso universal, retrato, artes gráficas y rayos X para suministro a los hospitales del Insalud.
En 1973 se lanzó al mercado el nuevo tipo de papel de color Valcolor RC, sobre soporte de papel recubierto de politeno. En 1957, en el barrio de San Alberto, la Sociedad Española de Productos Fotográficos Valca, S.A. desarrolla una labor social con la construcción de viviendas permanentes para sus trabajadores, edificando 18 viviendas de renta limitada. Cuatro años después se construyen en el mismo barrio otras 9 viviendas y un cinematógrafo con 219 localidades en el solar, de unos 700 metros cuadrados, que la empresa había cedido a la Junta Parroquial de Sopeñano. La dirección de Valca, S.A. presenta suspensión de pagos el martes 21 de enero de 1992. La plantilla de la empresa en ese momento era de 288 trabajadores.
La crisis de 1992 que llevó al cierre de Valca no fue la primera que sufrió esta sociedad. En 1984 esta empresa quedó inicialmente excluida del concurso de suministro de material radiográfico a los hospitales del Insalud, que provisionalmente se adjudico a Agfa (52%) y 3M (48%). Gracias a la intervención del alcalde de Mena, Armando Robredo, y del ministro Julián Campo, de origen menes, el concurso se resolvió finalmente adjudicándose a Agfa el 37,6%, a 3M el 32,5%, y a Valca el 29,9%. La adjudicación definitiva de este concurso permitió la continuidad de la empresa una década más y la conservación de los 430 puestos de trabajo de la plantilla, 264 de la fábrica de Sopeñano.
Un excelente reportaje fotográfico sobre los restos de la fábrica es el realizado por el fotógrafo bilbaíno Alfonso Batalla (Madrid, 1958) durante los años 2010 y 2011; una colección de 134 fotos a la que puede accederse haciendo click en la foto inferior:
ARCHIVO. Entradas anteriores sobre VALCA:
20/04/2017. VALCA. Una empresa vizcaína en el valle del Kadagua burgalés.
Hola, fui en los años setenta un consumidor a nivel industrial del papel Valcolor RC. Tuve ocasión de tratar con los directivos, el Sr. Ausín químicos, el Sr. Chacón y comerciales de Valca en Baleares el Sr. Bañón y el Sr. Domenech y visite la fábrica de Villasana de Mena durante su mejor época. Comprobé la ilusión del équipo de investigación para fabricar en España un papel fotografico en color que fuera competitivo con los estandares de calidad y precio de los fabricantes europeos, Agfa y japoneses, Fuji y americanos Kodak. Los medios de estos fabricantes eran incomparables con los que disponían en Villasana de Mena y aun así consiguieron fabricar un papel utilizable. Fue una proeza. Ver la situación actual de los edificios y el final de Valca me produce un sentimiento de gran tristeza.
Bartolomé Bibiloni Fuster. Laboratorio Betacolor. Palma de Mallorca
Hola Bartolomé,
Nosotros registramos la realidad, también con tristeza cuando se trata de patrimonio valioso, como en este caso. Al menos existen algunos notarios que registran la herencia y eso nos queda. Gracias por tus comentarios.
Te dejamos un enlace que seguro será de tu interés: https://arquilectura.com/2018/03/21/valca-una-industria-quimica-al-servicio-de-la-imagen-fotografica/
[…] la típica placa de Rayos X, sino un negativo de 4×5 pulgadas, blanco y negro, del fabricante VALCA, una empresa española de material fotográfico ubicada en Sopeñano de Mena, Burgos, que cerró en […]
Recuerdo mis comienzos como fotograbador y el famoso valcagraf que anulaba los clichés con soporte de cristal, que nostalgia…
Cuando me aficioné a la fotografía en blanco y negro, mi primer carrete fue un Valca, yo lo revelé y pasé a positivo con el papel de la misma marca, fue un momento mágico para mi, si experiencia alguna, tan solo con las instrucciones que me daba el fabricante, y un libro sobre trabajos en laboratorio fotográfico. Creo que parte de la culpa de su cierre también fue nuestra, por utilizar productos de marcas muy conocidas, Agfa, Kodak, Ilfort y otras, no hemos sabido tirar por nuestra industria nacional. Aún recuerdo personas que me decían… por qué usas aún a Valca? las hay mejores, pues puede que si, pero Valca daba muy buenos resultados sin apenas complicaciones. Hoy día cuando abro un álbum con fotos Valca, de hace treinta y tantos años, aún desprende ese olor característico, y mi mente se traslada e esa época inocente, inexperta, pero llena de ilusión, y Valca esta allí conmigo. Recordar a esta marca y ver como acabó me hace saltar alguna lágrima, que pena.