Fue en 2009 cuando la historia de la Fábrica de gas de Donostia – San Sebastián, uno de los mejores ejemplos de conjunto del Patrimonio Industrial Vasco, llegaba a su final. Algún día tendremos que contarla con detalle, para conocimiento de las nuevas generaciones que no conservan en su memoria lo ocurrido en aquella primera década del nuevo siglo con uno de los más importantes y valiosos patrimonios de la industrialización de la ciudad. Un patrimonio que trascendía fronteras por constituir un notabilísimo y único ejemplo de preservación de una central térmica de producción eléctrica por gas para distribución urbana.
Si tuviéramos que resumirla diríamos que fue el ejercicio puro y duro de la fuerza del poder por parte de la Alcaldía de la ciudad la que acabó con el patrimonio de la Fábrica de gas. Nunca existieron razones de suficiente entidad que justificasen su demolición. Primero fue el empeño de los rectores de la Filmoteca Vasca y el Departamento de Cultura del Gobierno Vasco en erigir la nueva sede -de un centro dedicado a la preservación del patrimonio cultural, no lo olvidemos- sin ninguna consideración hacia el patrimonio arquitectónico y tecnológico ya protegido al máximo nivel como monumento. El proyecto del arquitecto Joaquín Montero, proponía la demolición del interior de los edificios, tras extraer de ellos todas las instalaciones mecánicas y de servicio existentes, quedando todo el conjunto arquitectónico, envuelto en una gran cápsula acristalada.
Y, tras el abandono de la iniciativa de la Filmoteca, llegó la obsesión de la Alcaldía de Donostia / San Sebastián por borrar cualquier resto construido de la memoria fabril de Morlans y de la Fábrica de Gas. Año tras año, los esfuerzos de la Asociación Vasca de Patrimonio Industrial y Obra Pública, AVPIOP por mantener -primero- los pequeños edificios del frente ferroviario y otros elementos significativos en pie y, mas tarde, por hacer respetar la letra y el espíritu del decreto de protección del monumento, se mostraron inútiles ante el insistente e inexplicable empeño en hacerla desaparecer. Durante años, negociamos su protección en el Plan General y el desmontaje y traslado provisional del Gasómetro por las obras del viaducto de Morlans. Más tarde insistimos en demostrar la compatibilidad con los nuevos usos residenciales; todo inútil. Finalmente, apareció un nuevo actor, el Departamento de Educación del Gobierno Vasco -¡sí, el Departamento de Educación!- exigiendo la demolición del Bien Cultural Calificado para cubrir una nueva necesidad, habilitar el patio de un centro educativo. Y en ese transcurso de los meses, los edificios ya sin la protección del uso -aquí un recuerdo a los desvelos del Director de la Fábrica- abandonados a su suerte, y al salvajismo y la expoliación consentida: la maquinaria y los elementos técnicos centenarios de la primera central que iluminó con electricidad la ciudad parcialmente desmontados y camino de las chatarrerías.
Y finalmente, el derribo, y la inadecuada reproducción levantada, con muros de hormigón, en la nueva ubicación, con otra orientación y con otro uso: gimnasio del centro educativo, albergando en un rincón, vergonzantemente y sin ningún criterio patrimonial, el gasomotor y una mínima parte de las instalaciones de la central. Al mismo tiempo, el valioso gasómetro -excepcional por su antigüedad y por haberse conservado integro, incluida la cúpula interna con sus sistemas de deslizamiento- fue mutilado y recolocado únicamente el vaso exterior en un espacio periférico, entre arbolado y edificaciones, fuera de cualquier contextualialización.
Prometemos hacer la narración de lo sucedido. En parte, nuestros lectores ya tienen al pie de esta entrada una referencia de archivo a las entradas que hemos dedicado anteriormente a la Fábrica de Gas, sus instalaciones y la protección legal de las mismas. Hoy queremos dejar que sean otros quienes muestren su opinión sobre los hechos que acabaron con la fábrica y por ello transcribimos la ficha elaborada por la Sociedad Instituto Geográfico Vasco «Andrés de Urdaneta» – Euskal Geografi Elkargoa, INGEBA sobre el Traslado de la central eléctrica de la Fábrica Municipal de Gas de San Sebastian y derribo de la chimenea y carboneras de la misma.
Fotografía aérea de 1989:
1 central eléctrica. 2 Gasómetro antiguo. 3 Chimenea. 4 Carboneras. 5 Otros edificios.
Impacto: ****
Observación: Traslado de la central eléctrica (1) de la Fábrica Municipal de Gas de San Sebastián. En su interior se conservaba un gasomotor. También se ha conservado el gasómetro más antiguo de los tres que poseía la fábrica.
Descripción:
Protegido por el Gobierno Vasco el gasómetro (2), la central eléctrica y el gasomotor que ésta última poseía, han sufrido toda una serie de actuaciones que se consideran poco adecuadas: la central fue demolida y construida una réplica a unas decenas de metros del emplazamiento original, siendo cambiada su orientación. Además del grave impacto que supone la modificación de su emplazamiento, la pretendida «reconstrucción» puede considerarse una sustitución en toda regla, pues no se han empleado los materiales originales, al ser sustituida la mampostería por un muro de hormigón armado. Sobre él se han colocado las piezas originales de sillería.
Se considera un hecho muy grave por contar con la máxima protección inicial por parte del Gobierno Vasco: los elementos protegidos no tendrían que ser desprotegidos, trasladados o modificada su protección tan a la ligera. La protección del patrimonio debe estar por encima de cualquier otra actuación, ya sea urbanística o de cualquier otro género.
Además del citado edificio y del gasómetro (1), fueron demolidos otros edificios (5) , la chimenea de hormigón revestida de ladrillo (3) y unas interesantes carboneras (4) cubiertas mediante una delgada estructura curva de hormigón.
Propuesta general: Se tendrían que haber conservado, como mínimo, y en sus emplazamientos originales: el gasómetro, la central, y la chimenea. Posiblemente, también las carboneras e incluso los edificios que acompañaban a la central eléctrica, si bien estos últimosa título puramente ambiental.
La razón de los derribos y del traslado es la construcción de viviendas y un centro escolar en la zona ocupada por la Fábrica de Gas. Lo correcto hubiese sido planear el barrio teniendo en cuenta la posición original de los elementos de patrimonio protegidos, que tendían que haber sido preservados en sus emplazamientos originales.
Subsanable: No.
Puede verse la ubicación actual de los restos de la Fábrica de Gas en las siguientes imágenes tomadas de Google Maps.
Las coordenadas de los dos elementos son: Central Eléctrica / Gimnasio educativo: 43.308054, -1.982292. Cuba del Gasómetro: 43.307831, -1.984580.
ARCHIVO:
2015/06/25 Patrimonio Industrial Mueble: Gasomotor de la fábrica de gas de Donostia / San Sebastian
2009/01/03 En 2001 El Gobierno Vasco subvencionó a la Filmoteca para ocupar la Fábrica de Gas de San Sebastián
2009/01/01 En 2002 la Central Eléctrica de la Fábrica de Gas de San Sebastián se declaró Bien Cultural
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